El color a diferencia de la creencia popular no tiene nada que ver con la toxicidad del animal (así como el tamaño tampoco). La diferencia entre estos tipos de toxinas se basa en los síntomas que presenta el afectado, la picadura proporcionada por todos los alacranes es dolorosa, sin embargo los síntomas que le continúan son los que deben ser considerados; el primero de ellos es el adormecimiento de la zona afectada (puesto que el veneno es una neurotoxina).
Una forma de identificar alacranes peligrosos, no corresponde necesariamente a a su color, sin embargo, el tamaño relativo de la cola es importante para identificar ciertas especies de alacranes venenosos, en los alacranes tóxicos podemos observar que tiende a ser delgada, los segmentos se van alargando y adelgazando; a diferencia de los alacranes no tóxicos, los segmentos también se van alargando pero el adelgazamiento no es tan notorio e inclusive puede ser mínimo. el último segmento del metasoma, antes del telson que es donde se ubica el aguijón es fácil de distinguir en los alacranes tóxicos, en algunas especies suele ser muy delgado y largo (preferentemente en los machos) en tanto que en las especies no tóxicas tiende a ser más abultado y no hay un alargamiento muy prominente con respecto a los otros segmentos.