En México podemos toparnos con especies venenosas y no venenosas, se consideran fauna protegida en México riesgo de extinción 28 especies, con base en lo establecido en la NOM-059-SEMARNAT-2010, Protección ambiental-Especies nativas de México de flora y fauna silvestres-Categorías de riesgo y especificaciones para su inclusión, exclusión o cambio-Lista de especies en riesgo. Hay aproximadamente 2.900 especies diferentes de serpientes en el mundo. Tienen una amplia distribución geográfica y se pueden encontrar en todos los continentes excepto en la Antártida. Por el contrario, hay muchas islas libres de serpientes como Nueva Zelanda, Irlanda o Islandia. Pueden vivir en muchos hábitats diferentes: desiertos, pastizales, bosques, montañas e incluso el mar.
México alberga más de 400 especies de serpientes, de las cuales 216 son endémicas, lo que representa un número importante considerando que 3 mil 921 son las especies que se conocen en todo el mundo, lo que hace a nuestro país ocupar el primer lugar a nivel mundial en especies de serpientes, esto representa una gran responsabilidad en cuanto a su conservación, porque cumplen con funciones en el ecosistema como depredadores y controladores de plaga de roedores, además de ser alimento para otros organismos.
Sobre el papel, distinguir a las culebras de las víboras es sencillo, pero en la práctica la complicación deriva de la dificultad de observarlas en malas condiciones de visibilidad o cuando están en movimiento.
Por su parte, las víboras son serpientes venenosas y tienen la cabeza algo más ancha y triangular, a veces con un hocico terminado en punta, según explica el herpetólogo e investigador Fernando Martínez Freiría, que investiga la biogeografía, ecología y conservación de las víboras ibéricas.
Las culebras, por su parte, suelen ser algo más grandes de tamaño, aunque también las hay más pequeñas y tienen la cabeza más redondeada que las víboras. Sin embargo, la principal diferencia es que las culebras no son venenosas, mientras que las víboras sí lo son.